A lo largo de la vida necesariamente tenemos
que relacionarnos con los demás y lograr entendernos para poder conseguir
aquello que nos proponemos.
Casi todas las cosas que queremos hacer nos
“obligan” a entendernos con otras personas, es la forma de trabajar en equipo,
conscientes o inconscientemente siempre estamos interactuando en equipo, lo
importante para que funcione es hacerlo bien y sacarle provecho.
Hoy en
día, la capacidad de trabajar con los demás es
una competencia fundamental, no solo en el ámbito
educativo, sino también en el personal y en el laboral. En este último, es en el que me voy a centrar.
Las empresas se sustentan en la idea del trabajo en equipo,
realizar juntos cosas que de forma individual no se pueden o hacen difícil
conseguir el mejor resultado. Entre todos, contribuyendo cada uno con su
granito de arena el resultado final será mejor y más satisfactorio.
Desde que se entra en una empresa establecemos siempre
algún tipo de colaboración que dependiendo del puesto desempeñado será mayor o
menor, pero tener la capacidad de trabajar en equipo nos va a permitir aprender
de los demás y poder afrontar mejor los retos que vayan surgiendo.
Estar junto a otras personas que pretenden lo
mismo, unir nuestros esfuerzos, beneficiarnos del trabajo de los demás y que
los demás se beneficien del nuestro; son aspectos positivos del trabajo en
equipo.
Sin embargo no es sencillo, también tiene sus
dificultades: ser capaces de entenderse, tomar decisiones, elegir el método
adecuado, lograr un buen sistema de comunicación,… son algunas de las
dificultades que nos encontramos para lograr los resultados esperados.
A pesar de todo, una vez finalizado el trabajo,
suele merecer la pena, aprovechar la energía común para ponernos en marcha,
despertar la creatividad de cada uno con las aportaciones de los demás o
construir un espacio común para enriquecernos de las aportaciones de los demás.
El trabajo
en equipo es, sin lugar a duda, una oportunidad de intercambio y enriquecimiento a
pesar de que no resulta sencillo sortear obstáculos como los mencionados: la
integración, el común acuerdo, etc…. Es una capacidad realmente valorable para
cualquier ámbito, pero que requiere compromiso, paciencia y responsabilidad por
parte de los integrantes.
Con la entrada de las nuevas tecnologías, el
trabajo en equipo también ha sufrido evoluciones, ahora, y cada vez más, se
trabaja con herramientas virtuales, lo que ofrece numerosas ventajas pero
también inconvenientes.
La red nos ofrece infinitas herramientas
digitales con posibilidades de relacionarnos, aprender, compartir, etc…
nos permite mayores posibilidades de trabajar en equipo, en la distancia.
Entre las ventajas, está la posibilidad de
trabajar conjuntamente desde la distancia, sin ir más lejos, en este curso, un
grupo de personas procedentes de diferentes lugares, más o menos cercanos, son
capaces de compartir información, conocimientos y trabajos de manera virtual,
esto, a su vez, conlleva otras ventajas añadidas como el ahorro de los tiempos
de desplazamiento, la adaptación del tiempo a las limitaciones de cada persona,
o la comodidad de trabajar desde tu propia casa.
En el caso de los trabajos grupales presenciales,
es obvio que ante una tarea debemos reunirnos con nuestros compañeros/as para
cumplir con el proyecto a realizar. Cuando es así, suele ocurrir que el trabajo
se suele mezclar con risas, bromas o comentarios simpáticos, que hacen siempre
el trabajo mucho más ameno y llevadero y además te permite conocer mucho mejor
a las personas con las que estás trabajando; pero ¿qué ocurre cuando el trabajo
es a distancia a través de herramientas digitales? pues que los o las integrantes del
grupo, obviamente no se reúnen en una casa, en una cafetería o en un espacio
determinado, sino que pasan a formar parte de una comunidad virtual,
donde de igual manera deberán además de establecer un buen sistema de
coordinación previo, verter sus opiniones, colaborar entre sí y discutir los
temas. Sin embargo el aspecto social y/o lúdico del trabajo queda en cierto
modo relegado. Es obvio que se pierde menos tiempo y supone menos costes, pero ¿se disfruta
del trabajo en equipo de la misma manera? Ahí queda la pregunta
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